Vicent Ferrer

Resvalan las lagrimas por mi cara, mojando las sabanas. No es un golpe duro es un golpe dulce, como su mirada, como las palabras de su mujer que hablan de descanso. El descanso sereno de un hombre que nunca paro de trabajar. Pero es que su trabajo favorece actualmente a 2.200 pueblos de la India. Un dia se planto en Bombay y le impresionaron sus sonrisas, desde entonces no paro de dar vueltas su cabeza. Inventando las maneras para darle a un pueblo misero un poco de sosiego. Convirtiendose finalmente en un especialista en desarollo rural.Mano a mano.Desde el amanecer hasta la puesta de sol. Un mago que junto a su gente consiguio convertir la tierra seca en cultivo,abriendo pozos profundos, levantando centenares de pequeñas casas para sus familias, creando infraestructuras educativas y medicas...convirtiendo lo injusto en dignidad.Su vida ha sido muy digna, no se me ocurre una vida mejor dedicada. Inspiracion infinita y luz en el camino a seguir. Decia que el mundo de hoy sufre de dos grandes enfermedades, de pobreza y de egoismo... Y yo aqui encerrada en una habitacion pensando en el color de las sabanas que voy a colocar para que ande a juego co los cojines, mientras hierve el " Che Guevara" en mi interior y Vicent hace que resuenen campanillas en mi conciencia...las de la buena direccion. Solo espero tener la serenidad para verlo y la fuerza para hacerlo. No quiero terminar el escrito sin resaltar su sabiduria,su humildad y su perseverancia, moviendo montañas y a miles de personas. La infinita dulzura y el amor de una mirada...La pasion de un terco que se convirtio en alquimista por el bien de los demas.